NO ME OLVIDES

Con facilidad recordamos los malos recuerdos y pocas veces las alegrías y buenos momentos que vivimos. Cada día el sol sale detrás de la colina y al atardecer, se pierde entre las cumbres de la lontananza. Es tarde ya y la noche nos cobija con su manto frío.

Al ver la cruz envejecida, corroída por el tiempo, recuerdo los tiempos pasados. A mi mente remontan las risas y las más bellas imágenes de mis padres y abuelos, de mi hermano, prima y tíos... de amigos y tantas personas queridas que conocí y amé.

No hay día que no los recuerde. No hay noche que no me pierda en ese bosque ya mustio, poblado de hojas marchitas, de flores renovadas, de vientos pasajeros.

Mi corazón aún late llevándome como la hoja que a flote va llevada por el arrollo entre sombras y soles, piedras y ramas, entre saltos y plácidos descansos.

Late no como tambor vacío. Late como un eco que entre montañas lleva el amor sobre las nubes en todas las direcciones del mundo perdido en el ruido y el desengaño.

No me olvides. Llévame contigo, porque si quedara solo, moriría de pena y hastío. No me olvides, porque olvidarte no pudiera. Y si olvidarte quisiera, tan vida perdida volviera. No me olvides amor, porque sin amor no viviera. Y si mi amor se olvidara, vivir es tan solo olvido. No me olvides. No me dejes, porque perdido viviría sin tu amor no llevara.