Capítulo X: LA TENTACION DE LA TARDE
- estradasilvaj
- 7 jun 2022
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"Eran casi las dos de tarde, cuando reposaba del viaje de regreso de la Misión. Estaba muy exhausto.
No supe en que momento me quedé dormido. Y mi mente me condujo a un lugar muy placentero. Una colina verde rodeada de hermosos árboles llenos de frutos y flores.
Al pie de la colina se encontraban unos niños jugando con un balón, mientras sus padres recogían las manzanas del suelo.
De pronto, una figura luminosa apareció en el borde de la colina. La mirada de todos se volvieron hacia Él. Y como cautivados, salieron a su encuentro.
Se escuchó una voz profunda que dijo:
'Amigos, hermanos míos. La paz sea con vosotros.
Mi Padre, vuestro padre los llene con su inefable luz. Admirad lo hermoso de su Majestad, que címbalos y cítaras cantan en unión del coro de Ángeles y Principados.
Mirad allá, el ascenso del ejército blanco de los mártires. Hombres, mujeres y niños que han lavado en la tierra su sangre, uniéndola al Primogénito de todos.
El Pueblo, el resto de todos los llamados, los que han permanecido fieles hasta el fin, consagran su vida en holocausto.
Mis Arcángeles y Santos los acompañan entre gritos de júbilo y alegrías'.
Y el lugar se llenó de fiesta y alborozo. Y todos cantaron unánimes: Alabado sea Dios! Alabado por siglos y siglos! Alabado sea el Cordero! El Hijo a amado, el único y radiante de luz! Gloria a Dios en los cielos y en el universo entero!...
Las campañas dieron aviso de la Misa de la seis de la tarde.
Qué hermosa tentación, la del Cielo prometido!".
Y el padre Remis, esa noche no fue tentado por un tiempo.




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