AMOR OCULTO

Conozco quizás demasiadas historias, felices y desdichadas.

Lo triste ha sido que poco he logrado que terminen bien, como los bonitos cuentos: "...y fueron felices por siempre". Es que no está en mí que el amor triunfe en una pareja. Qué suerte!

Por eso qué importante es educar al hijo e hija con el ejemplo en el matrimonio. Si le damos unos indeseables ejemplos desde las relaciones conyugales, no esperemos que sean felices ellos cuando sean mayores.

Cada vez estoy convencido que detrás de un relación amorosa existe un amor oculto. Sí, otro amor. Quizás el verdadero.

No voy a censurar en esta ocasión a nadie, más bien, me gustaría mostrar el lado quizás "bueno" de este amor oculto. Y no con ello estoy claramente aprobando la infidelidad, mucho menos el adulterio porque eso es otro asunto.

He escrito en varias ocasiones que no es fácil amar y que son pocas las personas que logran amar bien en la vida. Y amar bien para mí significa diáfanamente, sin tapujos ni engaños.

Un amor oculto es quizás ese amor que no sabemos demostrar. Decimos con frecuencia: "te amo, eres mi vida" y no sé cuántas palabras que suenan bonito. Pero es sólo eso, suenan bonito.

El hombre, en especial, tiene que ser honesto y limpio cuando dice que ama a una mujer. Porque estoy seguro que la mujer sí se lo toma en serio. Ella se entrega totalmente cuando ama.

Me gustaría compartirles entonces, algunas ideas que pueden ayudar. Advertencia: funciona para quienes están decididos a amar sin mentiras, chantajes ni egoísmos. No caben aquí los hombres violentos y quizás, de alguna manera la mujer superficial.

1. Muestra lo que eres, no lo que pretendes ser. Es muy común. Quizás cuando se es adolescente podamos entenderlo porque es un novato. Pero, ya en un adulto, es un juego sucio.

2. El hombre de dos vidas. Tan frecuente en las calles. Y no quiero tildar el asunto de adulterio, sino de la incapacidad de algunos hombres de ser responsables en una relación conyugal seria y equilibrada. Eso de dos vidas, de varios amores, además de ser vulgar es obsceno. Demuestra mucha inmadurez y en el fondo graves problemas de afectividad.

3. Podemos aprender mucho de la mujer de lo que es el amor. No me tome a mal porque no estoy hablando de sexo, sino de integridad. La mujer lamentablemente sufre en la relación conyugal si el hombre se queda en la satisfacción sexual. Eso no es amor, porque hay sentimientos, emociones, deseos no necesariamente carnales, sino de un orden espiritual, no religioso.

La mujer quiere ser amada por lo que es y no por lo que encuentra el hombre en ella. Son dos dimensiones diferentes. Por eso, cuando se dice: "serán una sola carne" y viene todo lo demás que se ha agregado y se olvida con facilidad: "la amarás en la dicha y desgracia, en la riqueza y en la pobreza...", suena todo muy bonito. Pero la realidad, viene después.

4. Hay que trabajar no sólo para vivir o sobrevivir como familia, sino para ser amados hasta el final con todos los infortunios del camino. Porque entre más unidos piensen, actúen y decidan podrán enfrentar los abrojos y espinas.

5. No hay que enfriar el amor. Se ama hasta final y día y día, por encima de las diferencias y molestias. Sí no somos capaces de hacerlo, poco durará la relación y eso considérelo un fracaso. Tampoco es asunto de vivir un calvario. No vale la pena si no hay amor.

No estoy a favor del divorcio, pero es que me parece terrible que una pareja no sea capaz de entenderse, perdonarse y arreglar sus asuntos con la delicadeza y respeto que se merecen ambos.

Tengo que confesarles que como célibe, ustedes podrán reírse de mí, porque pensarán o dirán: qué sabe éste del matrimonio. El amor no es propiedad del matrimonio. Es un camino que todo hombre y mujer hace y camina toda su vida.

Creo que lo más hermoso del amor oculto es que todavía está ahí, escondido, esperando salir para gozar de la vida que Dios nos ha dado.

Por favor, no dejen de amarse por entero y con profundidad.