LA ÚLTIMA MONEDA
- estradasilvaj
- 17 mar 2023
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Hoy, muy temprano recibí un regalo de las manos de un pequeño y querido niño, con una nota escrita por su puño y letra.
Más que ese lindo gesto, es lo significativo, pues provenía de una madre que quizás realizaba un gasto de lo único que tenía.
Recordé aquella anciana viuda del Evangelio que dio como ofrenda la única moneda que poseía, se sacrificó.
Dios nos habla de maneras tan sublimes como este bello gesto, pues está mujer sé que se ha desprendido desde el corazón.
Yo te pido que abramos nuestro corazón para que sea capaz de encontrar el camino del amor y la generosidad, desprendido, sacrificando lo que tenemos por amor a los que no tienen, padecen y necesitan de nuestro apoyo.
Te aseguro que aquella mujer dio más que cualquier otro, y habrá recibido infinitamente la gracia y bendición de Dios.
Dios bendiga las manos humildes y sencillas. Gracias Padre por recordarme que lo que recibimos o damos es tan solo una moneda. Porque Tú, oh Dios, eres nuestro mayor galardón y posesión.
Benditas las manos generosas.

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